Llamativamente, hasta ahora el MOPC no está ejecutando las
garantías presentadas por el consorcio que tuvo a su cargo la construcción de
la Ruta XIII. Sumado lo ocurrido con esta obra y en otras, el Estado tendría un
perjuicio de más de 20 millones de dólares, cuya recuperación sería imposible,
según referentes del sector vial.
El propio ministro Cecilio Pérez Bordón expresó preocupación al respecto y culpó del hecho a la anterior administración de la cartera de Obras Públicas.
La administración de Efraín Alegre había adjudicado al Consorcio Cotafel, constituido por las empresas Coinco, Tape Guaraní y Constructora Feldman, la construcción del asfaltado de la carretera que une Caaguazú, Yhú y Vaquería. Como principales responsables de la obra figuran Luis Sarquis y Sigfredo Feldman.
En su momento, el mencionado consorcio había ofertado la utilización de piedra en la construcción de la subbase, pero luego solicitó al MOPC reemplazar la piedra por cemento.
Su propuesta de construir la base de piedra a precios irrealizables había permitido al consorcio presentar la “mejor” oferta, la que a poco de haber cobrado el anticipo de US$ 8 millones abandonó la obra, que debió concluirse a finales del año pasado, pero hoy no existe un metro de asfaltado.
Según el pliego de bases y condiciones, el pago de los anticipos debe estar garantizado con pólizas de una aseguradora, con lo cual el MOPC tendría que ejecutar dichas obligaciones para recuperar los anticipos.
Antecedentes
Empresarios de la construcción advirtieron en su momento que la Constructora Feldman había abandonado ya la construcción de una obra vial por problemas financieros y que se estaba corriendo un serio riesgo al entregar nuevamente una tarea a un consorcio integrado por la mencionada empresa.
Indicaron que uno de los recursos para quedarse con las licitaciones es el de presentar un precio al cual es imposible ejecutar las tareas, pero una vez ganada la licitación se busca obtener cambios como el planteado por el consorcio Cotafel, consistente en reemplazar las piedras por cemento y las tuberías de hormigón armado por tubos de plásticos para las obras de desagüe de la zona urbana de Caaguazú, bajando los costos y la calidad de la obra.
El consorcio Cotafel también fue contratado en la era Alegre para la construcción de tres puentes en la ruta Nueva Italia-Carapeguá, en donde el denominado consorcio hizo lo mismo que en la Ruta XIII: cobrar el anticipo y abandonar las obras apenas iniciadas.
En la misma situación
Según nuestra fuente, en total existirían 18 tramos de rutas empedradas paralizadas que fueron entregadas a empresas fantasmas durante la administración anterior, entre las que se encuentra el empedrado Eusebio Ayala-Cerro de la Gloria y el empedrado Coronel Oviedo-La Pastora, que fuera adjudicado también a Tape Guaraní, empresa que integró el consorcio Cotafel, la responsable de la “ruta de la mentira”.
Pérez Bordón informó la semana pasada en una reunión de prensa que con los desembolsos realizados al Consorcio Cotafel para la construcción de la Ruta XIII y a Tape Guaraní para la construcción de tres puentes entre Nueva Italia y Carapeguá, el MOPC perdió entre US$ 15 a 20 millones, ya que las empresas adjudicadas cobraron los anticipos en la administración ministerial de Efraím Alegre, pero no hicieron las obras.
El ministro de Obras olvidó agregar que Tape Guaraní también hizo lo mismo, cobrar el anticipo y no hacer la obra, en el caso del proyectado empedrado que debería unir Coronel Oviedo-La Pastora.
Obras Públicas deberá rescindir en total 18 contratos conforme a la recomendación del Departamento de Asuntos Jurídicos, en los que las empresas cobraron sus anticipos, pero no han realizado las obras.
“Con muchos problemas”
“Recibimos una administración con muchos problemas. Realizamos todos los esfuerzos posibles para conversar con las empresas constructoras y aseguradoras, pero finalmente tuvimos que llegar a esta situación de rescisión de contrato porque ya no existía otra solución posible ”, dijo el ministro Cecilio Pérez Bordón.
“No hubiéramos querido llegar a esto porque, como bien dijimos, perdemos todos. Los anticipos fueron muy grandes, no se ejecutaron las obras y estamos rescindiendo contratos y judicializándolos”, agregó.
“Nosotros lanzaremos inmediatamente otras licitaciones, pero lógicamente el daño ya está hecho. Se ha perdido mucho dinero. Estaríamos hablando de allá por los US$ 15 millones a US$ 20 millones o más. Nosotros elevamos todos los documentos a la Contraloría, a la Procuradoría General de la República y a la Fiscalía, de modo que la solución del caso ya venga por cuenta de la Justicia”, concluyó diciendo Pérez Bordón.
Fuente: http://bit.ly/UsMJhX
El propio ministro Cecilio Pérez Bordón expresó preocupación al respecto y culpó del hecho a la anterior administración de la cartera de Obras Públicas.
La administración de Efraín Alegre había adjudicado al Consorcio Cotafel, constituido por las empresas Coinco, Tape Guaraní y Constructora Feldman, la construcción del asfaltado de la carretera que une Caaguazú, Yhú y Vaquería. Como principales responsables de la obra figuran Luis Sarquis y Sigfredo Feldman.
En su momento, el mencionado consorcio había ofertado la utilización de piedra en la construcción de la subbase, pero luego solicitó al MOPC reemplazar la piedra por cemento.
Su propuesta de construir la base de piedra a precios irrealizables había permitido al consorcio presentar la “mejor” oferta, la que a poco de haber cobrado el anticipo de US$ 8 millones abandonó la obra, que debió concluirse a finales del año pasado, pero hoy no existe un metro de asfaltado.
Según el pliego de bases y condiciones, el pago de los anticipos debe estar garantizado con pólizas de una aseguradora, con lo cual el MOPC tendría que ejecutar dichas obligaciones para recuperar los anticipos.
Antecedentes
Empresarios de la construcción advirtieron en su momento que la Constructora Feldman había abandonado ya la construcción de una obra vial por problemas financieros y que se estaba corriendo un serio riesgo al entregar nuevamente una tarea a un consorcio integrado por la mencionada empresa.
Indicaron que uno de los recursos para quedarse con las licitaciones es el de presentar un precio al cual es imposible ejecutar las tareas, pero una vez ganada la licitación se busca obtener cambios como el planteado por el consorcio Cotafel, consistente en reemplazar las piedras por cemento y las tuberías de hormigón armado por tubos de plásticos para las obras de desagüe de la zona urbana de Caaguazú, bajando los costos y la calidad de la obra.
El consorcio Cotafel también fue contratado en la era Alegre para la construcción de tres puentes en la ruta Nueva Italia-Carapeguá, en donde el denominado consorcio hizo lo mismo que en la Ruta XIII: cobrar el anticipo y abandonar las obras apenas iniciadas.
En la misma situación
Según nuestra fuente, en total existirían 18 tramos de rutas empedradas paralizadas que fueron entregadas a empresas fantasmas durante la administración anterior, entre las que se encuentra el empedrado Eusebio Ayala-Cerro de la Gloria y el empedrado Coronel Oviedo-La Pastora, que fuera adjudicado también a Tape Guaraní, empresa que integró el consorcio Cotafel, la responsable de la “ruta de la mentira”.
Pérez Bordón informó la semana pasada en una reunión de prensa que con los desembolsos realizados al Consorcio Cotafel para la construcción de la Ruta XIII y a Tape Guaraní para la construcción de tres puentes entre Nueva Italia y Carapeguá, el MOPC perdió entre US$ 15 a 20 millones, ya que las empresas adjudicadas cobraron los anticipos en la administración ministerial de Efraím Alegre, pero no hicieron las obras.
El ministro de Obras olvidó agregar que Tape Guaraní también hizo lo mismo, cobrar el anticipo y no hacer la obra, en el caso del proyectado empedrado que debería unir Coronel Oviedo-La Pastora.
Obras Públicas deberá rescindir en total 18 contratos conforme a la recomendación del Departamento de Asuntos Jurídicos, en los que las empresas cobraron sus anticipos, pero no han realizado las obras.
“Con muchos problemas”
“Recibimos una administración con muchos problemas. Realizamos todos los esfuerzos posibles para conversar con las empresas constructoras y aseguradoras, pero finalmente tuvimos que llegar a esta situación de rescisión de contrato porque ya no existía otra solución posible ”, dijo el ministro Cecilio Pérez Bordón.
“No hubiéramos querido llegar a esto porque, como bien dijimos, perdemos todos. Los anticipos fueron muy grandes, no se ejecutaron las obras y estamos rescindiendo contratos y judicializándolos”, agregó.
“Nosotros lanzaremos inmediatamente otras licitaciones, pero lógicamente el daño ya está hecho. Se ha perdido mucho dinero. Estaríamos hablando de allá por los US$ 15 millones a US$ 20 millones o más. Nosotros elevamos todos los documentos a la Contraloría, a la Procuradoría General de la República y a la Fiscalía, de modo que la solución del caso ya venga por cuenta de la Justicia”, concluyó diciendo Pérez Bordón.
Fuente: http://bit.ly/UsMJhX
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