El actual Presidente de la República, Federico Franco, es un mentiroso. El Presidente anunció que lucharía contra la corrupción y el nepotismo, incluso afirmó que le cortaría la mano a los que roban. ¿Y qué hace el Presidente liberal?
Lucha contra la corrupción. Ni siquiera le importa que el titular de Petropar, Sergio Escobar Amarilla, que se encuentra imputado por haber ingresado al país un combustible cancerígeno, de alto contenido de azufre, aun siendo médico de profesión. Pero no existe ninguna investigación, porque esta moniobra habría arrojado grandes beneficios a la parentela del distinguido Presidente de la República.
A Federico, que hoy hace populismo con el dinero de todos los paraguayos, no le importa que Escobar se haya “equivocado” con el pago sobrefacturado que realizó en favor de una proveedora amiga del gobierno de Fernando Lugo, que llegó a través de su abogado Marcos Fariña. El mismo reconoció que se trató de “apenas” US$ 700.000, mientras la estatal factura US$ 1.200 millones por mes, según dijo a nuestro diario, dejando entrever que para él esto sería una “zoncera”, parafraseando al expresidente Luis Ángel González Macchi cuando se le encontró en posesión de un automóvil robado.
Al Presidente no le importa el nepotismo para el acceso a cargos en Petropar, a pesar de que la ley habla del concurso de oposición para la función pública. Por ello permite que Escobar pague con fondos públicos a toda su parentela en la planta de Troche, entre la que están sus sobrinos, amigas “íntimas”, hermanos y padres de su presunta amante, entre otros.
El mismo titular de la Asociación de Cañeros de Troche, Teófilo González, el que más solicitó “el plus” y pide por el candidato liberal Efraín Alegre, tiene dos hijos y un hermano que trabajan en la planta de Troche. No concursaron para el cargo pero Escobar les contrató para “congraciarse” a través de él con el sector cañero. Se trata de Walter González, quien ingresó hace dos años, cuando Escobar era gerente en la planta, y Teófilo González (h), quien ingresó hace tres meses. El hermano del presidente de los cañeros se llama Juan de la Cruz González.
Así, en Petropar se dilapidan los fondos públicos y se alquilan personas, evitando manifestaciones o denuncias sobre los diferentes hechos de corrupción que pululan en Troche. Escobar ya desembolsó más de G. 17.831 millones en gratificaciones y premios, entre diciembre de 2011 y el jueves pasado cuando realizó el último pago de G. 3.300 millones. Está muy claro que a Franco le resbala la corrupción.
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