Si los gobernantes toman decisiones lícitas, ¿por qué esconder los
detalles al pueblo?. Es muy sospechosa la actitud del actual Presidente de la
república en relación al pre-acuerdo que firmó con la multinacional RTA por
ejemplo. Recordemos que lo hizo también Lugo firmando Ushuaia II, que escondía
acuerdos muy dañinos al Estado paraguayo, representando incluso la concesión de
la propia soberanía en cierto sentido.
Es el pueblo el que elige a sus gobernantes, por lo tanto, tiene el derecho de enterarse de las gestiones de los mismos. Es muy fácil para un gobernante decir: “con la línea de 500 KV se solucionarán los problemas”, cuando en realidad no se solucionará nada.
Hay que empezar a ofrecer al pueblo transparencia para que pueda volver a confiar en la clase política, porque ya mucho sufrió las consecuencias de decisiones tomadas en forma secreta o misteriosa. Esta es una lucha que debemos emprender con mucha fuerza también, es decir, acabar con el modelo de los misterios.
La gran preocupación de muchos gobernantes es justamente cómo hacer para transmitir a la ciudadanía la transparencia, que lo que se hace es transparente; por eso, muchos caen en el mal de utilizar la vía más fácil, pero que incluso a corto plazo constituye un azote a la misma ciudadanía, repercutiendo de un modo bastante negativo en la idea de política que ésta tiene. Por eso, muchos ya perdieron la confianza en los políticos y con razón, sin embargo, estamos experimentando un cambio y se renuevan las esperanzas en los gobernantes.
De este modo expresó Horacio Cartes: “Ese es el compromiso que llevamos de acá, romper el viejo modelo, romper el viejo modelo que el privilegio para un pequeño grupo de políticos o de amigos de políticos, si no rompemos eso, yo por lo menos me quedaría en mi casa”.
Es el pueblo el que elige a sus gobernantes, por lo tanto, tiene el derecho de enterarse de las gestiones de los mismos. Es muy fácil para un gobernante decir: “con la línea de 500 KV se solucionarán los problemas”, cuando en realidad no se solucionará nada.
Hay que empezar a ofrecer al pueblo transparencia para que pueda volver a confiar en la clase política, porque ya mucho sufrió las consecuencias de decisiones tomadas en forma secreta o misteriosa. Esta es una lucha que debemos emprender con mucha fuerza también, es decir, acabar con el modelo de los misterios.
La gran preocupación de muchos gobernantes es justamente cómo hacer para transmitir a la ciudadanía la transparencia, que lo que se hace es transparente; por eso, muchos caen en el mal de utilizar la vía más fácil, pero que incluso a corto plazo constituye un azote a la misma ciudadanía, repercutiendo de un modo bastante negativo en la idea de política que ésta tiene. Por eso, muchos ya perdieron la confianza en los políticos y con razón, sin embargo, estamos experimentando un cambio y se renuevan las esperanzas en los gobernantes.
De este modo expresó Horacio Cartes: “Ese es el compromiso que llevamos de acá, romper el viejo modelo, romper el viejo modelo que el privilegio para un pequeño grupo de políticos o de amigos de políticos, si no rompemos eso, yo por lo menos me quedaría en mi casa”.
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